jueves, 9 de agosto de 2012

Una reforma inconclusa


Todo es cuestión de enfoques. Tuvieron que pasar 5 años y 8 meses para que se presentara una reforma política que garantice plenamente al Presidente de la República electo tomar protesta en un recinto alterno, o lo que denominamos comúnmente el plan b, siendo estas opciones ante la presidencia de las mesas directivas de las Cámaras o ante el Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Lo anterior, para evitar que ante los cuestionamientos del candidato derrotado de las izquierdas, mismos que nuevamente resultaran improcedentes, se incite a movilizaciones con el propósito de paralizar únicamente la Ciudad de México y el Congreso de la Unión.

Ante la posibilidad de hechos futuros que impidan al mandatario concluir su encargo, se prevé el nombramiento del Presidente sustituto para el caso de fallecimiento o por incapacidad física o mental, esto por parte del Congreso de la Unión, así mismo otro escenario es la facultad del Secretario de Gobernación para entrar en funciones a fin de convocar a nuevas elecciones. Este escenario ya se presentó en nuestro Estado cuando falleció el Gobernador Héctor Terán, suceso que estuvo a punto de generar una crisis política, ya que la Constitución local no establece con claridad que hacer, no obstante lo anterior, a 17 años de distancia aun no se ponen de acuerdo para reformarla.   

El proyecto contempla además, involucrar a la sociedad en la toma de decisiones a través del plebiscito, esta figura ya existe en nuestro estado mas sin embargo nunca se ha aplicado por lo complejo del esquema. Así mismo, contempla que hasta el próximo proceso federal electoral se abre la puerta para candidaturas ciudadanas, situación que anteriormente había sido derogada, así como la iniciativa preferente con el objetivo de impulsar el movimiento legislativo para evitar bloqueos de los grupos parlamentarios ante iniciativas del Presidente.      

En el otro apartado, la reforma fue mutilada al dejar de lado la posibilidad de la reelección de legisladores, con lo que se buscaba reconocer la labor de quienes van más allá de sus actividades, dejando de lado la grilla e inasistencias a San Lázaro. Quedó también enlatado el intento de reducir el número de legisladores plurinominales, figura que se ha desviado de sus orígenes ya que en el pasado se concedía este espacio de una verdadera oposición participativa, como fue en su momento el caso del PAN. Lo anterior cobra relevancia, porque hace 25 años se concedieron 200 pluris para abrir los espacios democráticos, pero como lo hemos comentado, este esquema de representación ha sido rebasado por las exigencias de una sociedad más madura y participativa. 

Otra figura que queda de lado, es la segunda vuelta para elegir al Presidente de la República, lo que generó malestar de ex priistas que hoy militan en Movimiento Ciudadano. Ante estos sucesos, debemos resaltar que no se puede estar reinventando una vida democrática cada 6 años, en su lugar debe impulsarse una formación cívica en casa, en la escuela y en los centros de trabajo, para que la gente participe por vocación en la toma de decisiones, y no por ley. Como me comento un buen amigo “Lamentablemente en la política mexicana prevalece el principio de que únicamente podemos aspirar a lo que alcancen los acuerdos políticos y no a las necesidades de la sociedad”.

Apuntes al Vuelo: En nuestro folclor AMLO presenta sus 10 fundamentos básicos para invalidar vs las más de 100 felicitaciones de jefes de estado a EPN. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario