LAS LLAMADAS Y LOS TWEETS DE TRUMP
Por Juan Enrique “Pájaro” González
Todo es
cuestión de enfoques y del lado de la frontera en que te encuentres. En estos
días de modernidad, en que utilizamos las redes sociales, nunca nos imaginamos
que lo escrito por un personaje nos afectaría tanto, al grado que basto un
tweet para que subiera el dólar en dos ocasiones y otro tweet para que
poderosas empresas reconsiderarán invertir en México. Pero estos detalles no
son con dedicatoria exclusiva para los mexicanos o con toda la intención de
impactarnos por ser los vecinos de la Nación más poderosa en los últimos 80
años, estos mensajes los ha enviado a todo el Mundo para marcar territorio,
desde el Reino Unido hasta el Medio Oriente.
Así como los “tuits”
han sido directos, bajo la filosofía de que América es para los americanos,
ahora quieren aplicar la Doctrina Monroe al resto del planeta, por tal motivo
las respuestas por parte de los destinarios han sido tajantes y directas: “no
nos van a intimidar, antes que nada el respeto”. Este nuevo escenario ha
llevado al resto de los países a abrir los ojos cuando antes eran solamente observadores en la aplicación de la política
exterior de los estadounidenses, en América Latina los casos eran en Cuba o Panamá,
en Asía con Corea o Vietnam, por citar algunos antecedentes. Lugares en los que comenzó a participar en
asuntos domésticos, para luego entrometerse en recomendaciones de solución y
terminar por intervenir con acciones más agresivas.
Sobre este tenor,
México siempre ha mantenido una relación binacional de respeto y de buenos
vecinos, lo que ha generado para ambas sociedades grandes beneficios, dejándonos
consolidados como ejemplo de buena diplomacia ante el resto del Mundo. Porque
mientras nosotros apostamos por la paz y la celebración de tratados
internacionales, otras naciones sufrieron intervención militar y bloqueos
comerciales bajo el argumento de que se hacía por el bien y solidaridad de
ambos países.
Pero ahora
nuestro rol ha cambiado y debemos adaptarnos al mismo. Serán cuatro años de
dificultades y grandes retos para los mexicanos, por lo pronto los primeros
días de la gestión de Donald Trump ya se han enfocado en la construcción de un
Muro, el cual por cierto ya existe en cerca de 2 mil millas de frontera con
México, y en las políticas comerciales de proteccionismo, que en el pasado han
aplicado sobre productos japoneses y se han modificado por las políticas de
libre comercio en la zona del pacifico, salvo que ahora serán sobre nuestros
productos “Hechos en México” y los que manufacturamos para empresas
transnacionales.
El tema del
Muro sigue dando de qué hablar, particularmente por los pueblos que han vivido el
yugo de barreras divisionales, los cuales han externado que construir Muros no
es la solución, al ser la representación vergonzosa de la limitación de la
libertad, así lo externaron Alemania e Irlanda. Pero no todos piensan igual, ya
que Israel no solo está dividido por el muro construido en territorios
palestinos, también esta polarizado por las opiniones del Primer Ministro que aplaudió
via tweet la propuesta de Trump, lo que le representó una multitud de críticas
por parte de los judíos repatriados por el Mundo. A tal grado ha llegado el
tema, que los jugadores de los Patriotas de Nueva Inglaterra, que tienen
programado un juego de la NFL en el Estadio Azteca, han externado su rechazo a
jugar en un país en el que su Gobierno pretende separar con un Muro.
Por si esto no
fuera suficiente, en la semana se dio a conocer de manera oficial que en la
conversación de los Mandatarios de México y Estados Unidos ambos acordaron
dejar de lado el conflicto del Muro pero, en la Casa Blanca dieron a conocer que
Trump había sugerido “ayudar” a Peña Nieto con asesoría y enviar tropas a
México para combatir a los carteles de la droga. La respuesta por parte de Los
Pinos ha sido negar que esto ocurrió, que lamentablemente ellos no contemplan
el protocolo de seguridad de grabar las conversaciones y que además en nuestra
Constitución se prohíbe la intromisión de fuerzas extranjeras en los asuntos
internos, ni su entrada en territorio nacional. Analizando fríamente, para los
Estados Unidos las leyes nacionales y los tratados internacionales nunca han
sido impedimento para introducir ejércitos, por ejemplo en Corea del Sur y
Bagdad entraron en defensa de los intereses económicos y políticos de los
norteamericanos. Es importante recordar que esto ya ha ocurrido en México, la
última vez que tropas norteamericanas incursionaron fue hace 100 años, su
objetivo era atrapar a Pancho Villa en la sierra de Chihuahua, por lo que 12
mil militares permanecieron 11 largos meses, sin éxito alguno.
La versión que
ha dado el mismo Trump, es que alguien del equipo de Obama que aún permanece en
la Casa Blanca se encargó de abrir fuego amigo para desprestigiarlo. Pero
además ha desmentido la versión de Los Pinos, porque él en las entrevistas ha
expresado que el ejército mexicano no cumple con su papel en el combate a los
criminales de la droga, por lo que reconoció haber tocado el tema con Peña
Nieto, para enviar tropas que ataquen a los “bad hombres” y hacer la frontera
más segura. A pesar de la mejor intención de hacer las pases con nuestro país,
está no es la mejor señal, es realmente una primera llamada de lo que realmente
pretende hacer. Y para muestra están sus declaraciones negativas en campaña,
las cuales no ha aminorado, al contrario las ha sostenido y cumplido.
Esta disputa
tiene su fondo en el gran comercio entre ambas naciones, un intercambio diario
de $1,600 millones de dólares, y la supuesta renegociación del Tratado del
Libre Comercio , pero la Casa Blanca ha sido muy agresiva ya que pretende cancelarlo,
por tal motivo ha dictado medidas proteccionistas para sus productos y establecido
altas tarifas a los producidos en México. Este Tratado se firmó en 1992, con la
voluntad de las partes de eliminar totalmente las barreras aduaneras entre
México, Estados Unidos y Canadá, así como el retiro paulatino de las
restricciones sobre los productos de cómputo y automotriz, pero definitivamente
las actuales llamadas y tweets van hacia otro lado.
A tal grado ha
llegado el controvertido estilo de gobernar de Donald Trump, que este ya se ha
convertido en el tema central de programas de parodia, en los que recrean las
llamadas y tweets emitidos no solamente a México, también a Alemania y Australia,
con lo que busca avisar que hay un nuevo inquilino en la Casa Blanca, la cual
ya pintó de dorado y sacó a los medios de la histórica Sala de Prensa. En su
peculiar estilo, ha mantenido el mismo camino al saltar los protocolos en una
forma poco ortodoxa, por lo que sería importante que busque asesoría de parte
de un verdadero staff de actores de “House of Cards” o “Designeted Survivor”
para que lo preparen en el oficio político, que también requiere de actuación
profesional.
Notas al Vuelo: Recuerdo dos frases del primo de un amigo…’’vamos
a tejer fino”…y “no se puede vivir con tanto veneno”…Este Pajarillo Sigue Volando.
El autor
es analista político desde 1992, catedrático universitario y tiene amplia
formación en el servicio público.
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